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Los lugareños suelen decir que Laponia que tiene 8 estaciones en lugar de 4, y cada uno de ellas es única a su manera. Como se encuentra muy al norte en el ártico, la región está llena de naturaleza salvaje como se puede ver reflejada en los increíbles parques nacionales que pueblan la zona, por ejemplo, los de Urho Kekkonen, Pyhä-Luosto y Pallas-Yllästunturi.
Durante los meses más fríos, Laponia es un país de las maravillas del invierno que parece directamente sacado de cuento de hadas. La nieve blanca prístina cubre el paisaje y ofrece un magnífico contraste con el cielo constantemente oscuro. Tanto los lugareños como los turistas visitan la zona atraídos por las actividades invernales, como los paseos en moto de nieve, los safaris para ir a ver la aurora boreal, las excursiones a pie con raquetas de nieve, y el esquí o el snowboard que se pueden practicar en una de las muchas estaciones de esquí de la zona, como Levi, Ylläs, Pyhä-Luosto y Ruka.
En primavera el sol se alza de nuevo sobre la línea del horizonte, poniendo fin a la temporada de noche polar conocida como «kaamos» en finés. Durante esta época, la nieve todavía cubre las colinas y los días más largos y soleados atraen a los entusiastas del aire libre y los deportes de invierno que todavía desean alargar la temporada de disfrute de la nieve.
Durante el verano, Laponia es la tierra de la luz. El sol de medianoche ofrece un sinfín de noches blancas y la naturaleza ártica vuelve a la vida en una explosión de exuberantes tonos de verde. En Otoño Laponia se convierte en un lienzo de tonos icónicos dorados, ocres y rojos con la llegada de la «ruska», un término finés que significa la temporada del cambio de las hojas. Este es el mejor momento para ir de excursión a uno de los parques nacionales y senderos icónicos como el Karhunkierros (la Ruta del Oso), la ruta de senderismo más popular de toda Finlandia.
Además de su impresionante naturaleza, Laponia también ofrece muchos lugares interesantes para visitar. Descubre el Pueblo de Papá Noel en Rovaniemi, prueba la gastronomía local en uno de los mejores restaurantes de Laponia, aprende más sobre la población indígena sami y su rico patrimonio cultural, visita una granja de renos o huskys, siente la fiebre del oro finlandés o duerme en un iglú de cristal.